“Porque
nací un 21 de Julio fui bautizado de socorro
y me pusieron por nombre Práxedes,
que fue virgen y mártir.
A mi padre no le conozco, es casado y no tiene hijos
y mi madre sin marido. Dios la de juicio y a mi fortuna. Amén”
y mi madre sin marido. Dios la de juicio y a mi fortuna. Amén”
(Carta junto a un bebe abandonado en el torno de la inclusa s.XVIII.)
Las inclusas, hospicios o casas de expósitos eran lugares de
beneficencia, la mayoría fundados por la Iglesia en la Edad Media, donde se recibía, y criaba a los niños expósitos, "expuestos",
es decir, abandonados y entregados a esas instituciones.
El nombre de inclusa viene
de una imagen de la Virgen: Nuestra Señora de la Inclusa, que presidía la casa
de expósitos de Madrid, y que se trajo en el siglo XVI de la isla holandesa de
L'Écluse ("la esclusa")
El objeto de estos
establecimientos, era evitar infanticidios y salvar
el honor de las madres, por lo que admitían a los niños nacidos de modo
ilegítimo y a los huérfanos de padre con
madres en situación de pobreza extrema.
Para el abandono de los
niños de forma anónima, los establecimientos disponían de pequeños tornos abiertos a la calle. Había una persona destinada para recibir los expósitos,
que no debía moverse de la habitación inmediata al torno y acudía prontamente al
sonido de la campanilla u otra señal para recoger la criatura. No se hacían
preguntas sobre la identidad de los padres.
También se recibía la ropa o
dinero que se quisiera entregar para el niño, cumpliéndose la
voluntad de quien lo dejó.
La persona encargada de la
recepción en el dispositivo giratorio del torno anotaba la hora en que se recibía y seguidamente
lo llevaba a la sala destinada para los bautizos. Después de limpiarlo y
envolverlo, lo colocaba en la cuna que le correspondiera. Los expósitos
recibían cada uno un collar identificativo en el que se indicaba el año de su
llegada a la inclusa. Se les solía dar el apellido Expósito. La gente después les llamaba incluseros algo despectivamente.
monjas en el torno recogiendo un bebé |
Las inclusas disponían de
algunas amas de leche para dar de mamar a los expósitos. Según el Libro de la Siete Partidas de Alfonso X, las amas de cría debían tener “belleza exterior e
interior y carácter apacible.”
Las amas del establecimiento
tenían la obligación de criar los niños expósitos que les distribuían
procurando que no tuvieran más que dos. También contribuían a las labores de la
inclusa limpiando y aseando la sala de
los niños, la enfermería, la habitación de vestir y el dormitorio, además el lavado
de ropa de los niños. También se entregaba a los niños a amas que residían
fuera de la inclusa.
La mortalidad infantil en
España en los siglos XVI , XVII y XVIII al igual que en toda Europa en general
era muy elevada, podía llegar fácilmente
al 30% de los nacidos. Pero en las inclusas la mortalidad se disparaba, así en
la inclusa de Zaragoza se recogieron 2446 niños entre 1786 y 1790, de los
cuales solo sobrevivieron 200, por esas mismas fechas en Logroño y Vitoria se
recogieron 610 de los que murieron 400, en Huesca de 164 murieron 115 etc..
Esta terrorífica mortalidad
era debida a varias causas : Habia pocas inclusas, los largos y penosos viajes
hasta llegar a ellas, hacía que los bebes llegaran extenuados e irrecuperables.
Otra causa era la mala calidad y circunstancias de las amas de cría de fuera de
la inclusa a quienes se les entregaban sin investigarlas y además el corto salario
que se les daba que no cubría los gastos del niño. Otro motivo era que la
inclusa no proporcionaba las ropas para
el abrigo de los expósitos lo cual además de la penuria y perjuicios
que les causaba, retraía de ofrecerse a ello a muchas mujeres que los habrían
lactado y cuidado.
En la provincia de Segovia
había dos inclusas, la de Sepúlveda y la de la capital Segovia.
El llamado Hospital de la Caridad de San Cristóbal, en Sepúlveda, estaba
situada donde el actual cementerio nuevo de la Villa, en lo alto del monte llamado
de Somosierra. Realmente no era un hospital. Sino una casa para niños
expósitos. Se le conocía como Casa de la Caridad y fue probablemente la
institución más poderosa de Sepúlveda hasta el siglo XIX.
Sepúlveda. al fondo el cementerio nuevo donde se encontraba la inclusa. |
El hospicio de Sepúlveda existía por lo menos desde el reinado de Alfonso VIII y su mujer Leonor, o sea de 1.170 a 1.214, pues consta
el documento de un privilegio por el que el rey concedía el derecho de héminas
a este establecimiento. Esto era un impuesto equivalente al llamado Voto de
Santiago. Según se habla por ejemplo en el interrogatorio que se hizo al Vellosillo
en el Catastro del Marques de Ensenada en 1.752. Vellosillo contribuía
anualmente a la Casa de la Caridad con 8 fanegas de trigo
El impuesto fue la base de
la prosperidad económica que tuvo la Casa de la Caridad. Contaba con 3 iglesias
de su propiedad (San Cristóbal, San Lázaro y San Andrés), tenía también casas en
la Villa, viñas y un molino y muchas tierras en el Alfoz de Sepúlveda.
Al objeto de controlar los
impuestos que recibía, la Casa de la Caridad llevaba un registro minucioso de hasta
las mas pequeñas aldeas y poblados del Alfoz de Sepúlveda. lo que nos ha
servido para identificar por ejemplo el desaparecido barrio de Vellosillo que al menos en 1.452 existía junto a la Iglesiona (iglesia de Nª Sra. De la Serna), barrio llamado La
Serna de Vellosillo, así como otros tres lugares, quizás pequeños caseríos que
había también en la zona.
En 1.818, la Casa de la
Caridad ingresaba por héminas 1.082 fanegas de trigo. Las condiciones de los
niños eran mucho mejores que lo corriente en los establecimientos españoles. Y había preocupación no solo por su crianza sino por su futuro. Sin
embargo todo cambió, especialmente durante el llamado trienio liberal a principios del siglo XIX. cuando se suprimieron sus propiedades y derechos. En 1831 ya no había
dinero para pagar a las amas y estas amenazaron con abandonar a los lactantes. La
Casa de la Caridad de Sepúlveda acabó arruinada y abandonada.
El otro hospicio de la provincia, el de Segovia, llamado Hospital de la Misericordia fue
fundado en 1.495 por el obispo Juan
Arias. Tras las desamortizaciones liberales del siglo XIX se traslado el
hospicio al Convento de Santa Cruz la Real.
Convento de Santa Cruz la Real. Segovia |
"-.Niño,
si no te portas bien, te llevo al hospicio". regañó la madre, paseando por la
Alameda de la Fuencisla, La monja encargada del grupo de huérfanos, Sor Marina,
al oírla, le espetó: "El único delito que tienen estos niños es que son
pobres, huérfanos y no conocen a sus padres, pero son tan honrados como los demás".
(Segovia, años 50)
(Segovia, años 50)
Hasta con 400 residentes
contó en algunos momentos la Residencia Provincial de Segovia, situado en el viejo Convento de Santa Cruz la Real, a
las afueras de la ciudad, en el frondoso valle del río Eresma. Y cuyo director fue durante muchos
años desde la posguerra Don Jenaro García Burgos, el cura natural de Vellosillo. Las condiciones de vida
se asemejaban ya más a un internado de donde realmente los niños se libraron de
las condiciones de pobreza y pudieron adquirir formación como por ejemplo magisterio o
varios oficios para el momento de la salida del centro sobre los veinte años
La historia de la fundación
del Convento de Santa Cruz data del siglo XII.. Estuvo habitado por los
dominicos durante 6 siglos, hasta la desamortización de Mendizábal en el año
1836. En el año 1853 pasó a denominarse Establecimiento Provincial de
Beneficencia ya propiedad de la Diputación de Segovia.. En total unos 12.000
niños nacieron desde esa época en el centro, fueron dejados en el entorno o
entregados por otros medios, al cuidado de las Hermanas de la Caridad..
baño en el hospicio, años 50 |
El antiguo hospicio o inclusa de Segovia del Convento de Santa Cruz, ha pasado de ser la sede de una de las universidades internacionales más prestigiosas. Hace unos años lo adquirió la Universidad privada SEK, y después, en 2.011, el Instituto de Empresa. IE Universidad cuenta hoy con 1.400 alumnos.
Muy interesante Miguel Angel, como todo lo que escribes. Gracias
ResponderEliminarMuy Interesante Miguel Angel, gracias por tu aportación, estoy aprendiendo un montón.Yo nací en la Residencia Provincial de Segovia.
ResponderEliminarMiguel Angel, he aprendido mucho de lo expuesto en estos escritos. Yo participe en ellos desde el año 1956 hasta 1966. Muchas gracias
ResponderEliminarMiguel Angel, muchas gracias, he aprendido mucho en este artículo: mi madre fué abandonada en el torno del Hospicio Inclusa en marzo 1922. Leí que hay 112 cajas de archivo que abarcan desde 1815 hasta 1983 en las que se contiene, cronológicamente y con número de registro, los expedientes personales de niños et niñas que se encontraban en los establecimientos: como llegaron, cuando se transfirieron a otros, si fueron adoptados o prohijados y por quien. Dondé debo escribir y a quién recurro para obtener estas informaciónes sobre mi madre; ella murió hace 7 meses y me gustaría escribir su biografía para mis hijos y nietos. Gracias de antemano por su cooperación. Muy cordialmente.
ResponderEliminarPS: disculpe mi español aproximado, vivo desde 1955 en Francia y perdí el uso de mi lengua materna.
Estimado amigo. Debes ponerte en contacto con la Diputación Provincial de Segovia. Ellos guardan los registros que comentas. No los anteriores a 1809, cuando hubo un incendio que destruyó todos los registros existentes hasta ese momento.
EliminarSiento que la contestación llega tarde. Buscando otro tipo de datos, encontré esta página y vi tu pregunta.
Gracias
ResponderEliminarA mí me gustaría saber más de una tatarabuela llamada Felipa de la cruz exposita, posible nacimiento en boceguillas o Sepúlveda entre los años 1790-1820 huérfana y se casa con Sebastián Rodrigo Poza en Castrillo de Sepúlveda alguien me puede darme más datos gracias
ResponderEliminarcomo saber expediente de ingreso y salida de Inclusa de Segovia del año 1923 y salida año 1942
ResponderEliminaragradeceria informacion sobre el niño alfredo romualdo garcia lopez, depositado en la inclusa el 22-11-1923, o donde conseguir su expediente.
ResponderEliminargracias.