Cuenta una leyenda castellana que en algunos pueblos abandonados, el viento juega a veces con el eco ahogado de las dulzainas que marcharon, haciendo resonar los cantes festivos que antaño pasearon por sus calles.
La llegada de nuevos habitantes a uno de estas aldeas despobladas y la construcción de una nueva vivienda, desde el conocimiento de la arquitectura tradicional, ayudan a la recuperación de una memoria vital y del valioso legado de nuestros antepasados, suponiendo todo un motivo de celebración y esperanza.
...entonces la brisa despide el viento...la música vuelve a sonar...el pasacalles resurge...y la fiesta se extiende...
Genial la fusión musical. Me gusta mucho. La dulzaina es tan entrañable!
ResponderEliminarPues vamos a bailar y más si suena una dulzaina de fondo..
ResponderEliminarA mí me han encantado. Sara les conoce bien.
ResponderEliminarhttp://www.hexacorde.com/
Doy fe de ello, son muy buenos, les he visto en directo, y me encantó la fusión musical que son capaces de transmitirnos
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